Gastar de acuerdo a tus ingresos suena como una regla sencilla a seguir, pero muchos Americanos gastan más que lo que ahorran lo cual puede resultar en deuda. La buena noticia es que esto se puede evitar y es reversible con el tiempo. Con un poco de planificación, rastreo y ajuste a tus gastos, puedes vivir contento y de acuerdo a tus ingresos.
Adáptate a tus Ingresos



Crea un presupuesto.
El preparar un presupuesto no es otra cosa que examinar tus ingresos y gastos para determinar exactamente cuánto dinero recibes y en que lo estás gastando. Una vez que tengas una comprensión clara de tu presupuesto actual, qué ingresos estás recibiendo y de qué gastos eres responsable, mira más de cerca y encuentra lugares donde puedas gastar menos. ¿No estás seguro en dónde empezar? Comienza con esta calculadora de presupuestos.
Identifica deseos versus necesidades.
Una forma eficaz de optimizar un presupuesto es identificar tus gastos discrecionales (deseos) frente a tus gastos esenciales (necesidades). El reconocer la diferencia entre necesidades y deseos te puede ayudar a entender mejor que gastos son necesarios y en qué áreas puedes ahorrar. El primer paso es analizar tus gastos y hacer recortes a las compras no esenciales. Puede hacer una gran diferencia en tu presupuesto anual al liberar fondos que puedes ahorrar o usar en otras cosas. Puede ser que ahorres cientos de dólares al mes recortando tus gastos mensuales para entretenimiento o compras frívolas. El objetivo no es que dejes de gozar la vida sino de entender costos y priorizar gastos para tener cuentas de ahorros más sanas.
Aborda tu deuda.
Muchos Americanos tienen deudas ya sea en forma de préstamos estudiantiles, cuentas de tarjetas de crédito, o por gastos médicos o de consumidor. Puede tomar muchos años pagar la deuda, pero es importante vivir dentro de tus posibilidades y administrar tu carga de deuda. Tómate el tiempo para identificar cuáles de tus préstamos tienen las tasas de interés más altas y comienza a pagarlos primero.
Considera buscar asesoramiento profesional.
Si estás teniendo problemas y no puedes mantener tus gastos bajo control, considera buscar asesoría financiera calificada. Organizaciones como National Foundation for Credit Counseling® ofrecen educación financiera y servicios de consejos gratis para ayudar a los estadounidenses a formar hábitos personales financieros responsables. O considera encontrar un consejero financiero certificado gratuito a través de Asociación para Consejos Financieros y Educación para Planificaciones (AFCPE por sus siglas en inglés), una organización no lucrativa, cuyo objetivo es mejorar la educación financiera de consejeros financieros y clientes. Las herramientas de búsqueda por internet de AFCPE te pueden ayudar a encontrar el consejero correcto para tus necesidades.
Compartir